Como en la naturaleza, la luna y las estaciones, nosotras también, somos cíclicas
Somos mujeres cíclicas al igual que todo en la naturaleza, la luna y todo lo que nos rodea.
Cuando nos reconocemos como cíclicas, empezamos a ser conscientes de nuestra ciclicidad menstrual y nos damos cuenta de los dones que todo esto nos otorga.
Para cada ciclo tenemos también unos arquetipos femeninos que nos ayudan a potenciar nuestra vida.
Puede ser que te preguntes ¿Ciclidad femenina? Estamos muy desconectadas de nuestro cuerpo. El trabajo, la vida y el estres y el patriarcado hace que nos desconectemos.
Tenemos 4 etapas en nuestro ciclo. La menstrual, la preovulación, la ovulación y la premenstrual. Cada una de estas etapas nos afecta a nivel físico, mental, emocional y espiritual.
Existe un arquetipo para cada fase:
Durante la menstruación tenemos a la anciana, la sabia, la bruja. Es un momento de introspección, de descanso, de silencio. Nuestro invierno en la naturaleza, la luna nueva.
Durante la premenstrual es la Chamana, la sacerdotisa, la hechicera, es el momento que tenemos la capacidad de transformar. Nuestro otoño en la naturaleza, nuestra luna menguante.
Durante la pre-ovulación, tenemos a la doncella, a la virgen, cuando empezamos a brotar, nuestra primavera en la naturaleza, la luna creciente.
Durante la ovulación representamos a la madre, tenemos la capacidad de crear, es nuestro verano en la naturaleza, nuestra luna llena.
Cuando te conectas contigo muchas veces desaparecen los dolores, desaparecen enfermedades y realmente aparece tu mejor versión y empiezas a descubrir tu fuerza interior y tu empoderamiento desde tu esencia.